domingo, 2 de noviembre de 2008

I am the walrus


Caminaba hasta el cansancio,
él no sabía hacia donde iba,
su concentración se limitaba a seguir la eterna línea amarilla.

Seguír la línea amarilla,
seguír la línea,
línea, línea, línea...

Cuando estaba lo suficientemente concentrado
comenzó a sentir que su cuerpo crecía,
se volvía mohoso y asquerosamente pegajoso.

Ya no tenía piernas,
pero seguía avanzando,
línea, línea, línea...

Se sentía pesado,
sediento,
su agotamiento brotaba por sobre cada uno de sus poros.

Sin embargo su mente
se reducía a sólo tres palabras,
línea, línea, línea...

La ruta continuaba
y él seguía avanzando
mientras todo dejaba atrás.

No era más que una morsa.
( Esto es lo que imagino al escuchar ésta canción )

1 comentario:

giuli dijo...

hei clara
como va ?
grax por pasar
besos...